Qué regalar por Navidad - Colegio Base

Las últimas estadísticas ponen de manifiesto que el 80% de los niños españoles reciben 5 o más regalos durante las Navidades, muchos llegan a recibir 10 veces más regalos de los que necesitan.

Esto está llevando a que se hable del Síndrome del niño hiperregalado, en el que los niños no aprecian los juguetes que reciben, pierden la ilusión y se vuelven caprichosos, egoístas y consumistas.

Les compramos gran cantidad de juguetes que desenvuelven sin darles valor, volviéndose un juego en sí mismo desenvolver, sin centrase en lo que contienen los paquetes. Incluso pueden llegar a divertirse más jugando con las cajas y los papeles de regalo que con los propios juguetes.

En su mayoría los juguetes terminan olvidados, bien porque no cumplen las expectativas, se estropean a los pocos días o porque quedan arrinconados entre tantos juguetes.

El exceso de juguetes puede provocar en los niños:

  1. Bajo nivel de tolerancia a la frustración. Cuando les damos a nuestros hijos todo lo que nos piden, ayudamos a que se vuelvan egocéntricos y que crean merecerlo todo. Lo que no favorece que desarrollen su capacidad para enfrentarse a situaciones no favorables y a la frustración que éstas puedan generar, algo esencial en la vida. Pudiendo llegar a convertirles en niños continuamente insatisfechos.
  2. Sobreestimulación. Ante tantos juguetes, son incapaces de prestarles atención y dedicar tiempo a jugar con cada uno de ellos. Lo que lleva a que acaben por centrarse en uno y olvidando o no usando el resto, o que pasen de uno a otro sin disfrutar de ninguno.

Es cierto que nuestros hijos se merecen juguetes que les diviertan o les parezcan bonitos, pero también hay que pensar en regalar otros tipos de juguetes, que le ayuden a estimular su creatividad, su intelecto y su sociabilidad.

Además, si tenernos varios hijos, una muy buena opción es regalarles un juguete que puedan utilizar de forma conjunta, aprendiendo a compartir y fomentando así que jueguen entre ellos. Los juegos de mesa, de manualidades, los de construcción, incluso las pinturas o los instrumentos musicales son una buena idea en estos casos.

Para ayudarnos a controlar el exceso de regalos que reciban nuestros hijos, podemos seguir la Regla de los Cuatro Regalos. ¿En qué consiste?

Con ella se intenta limitar el número de regalos, para no saturarles de juguetes y otros objetos que incluso no llegarán a utilizar o de los que se aburrirán pronto. Según esta regla, se propone regalar:

  • Algo para usar. Aunque recibir algo de ropa, unas zapatillas o un pijama tal vez no les motive demasiado, puede convertirse en un buen regalo si elegimos lo que más les gusta o de su personaje preferido.
  • Algo para leer. Los libros potencian su fantasía y les abren las puertas a un mundo ilimitado de posibilidades. Sin duda, les enriquecen más que un juguete. Incluso desde que son bebés.
  • Algo que realmente necesiten. Los niños están acostumbrados a que les compremos todo lo que necesitan para su día a día. Incluir algunos de estos artículos en sus cartas para Papá Noel o los Reyes Magos es una buena forma de que empiecen a valorar esas pequeñas cosas. Pueden ser útiles escolares, productos de aseo, algún artículo para sus actividades extraescolares, un instrumento musical, etc.
  • Algo que deseen. Aunque tienen la ilusión de recibir todo lo que han pedido, que elijan su preferido les ayudará a ser más selectivos. Recibir muchos regalos no les beneficia, si se les regala todo lo que piden acaban perdiendo el valor de lo que tienen.

Un último aspecto que hay que tener en cuenta es que debemos hablar de esto con la familia, ya que de poco sirve que tomemos la decisión de no hacerles demasiados regalos, si el resto de la familia no lo sabe y regalan sin tener en cuenta estas pautas. Por ello es extremadamente importante que hablemos con la familia e, incluso, que nos pongamos de acuerdo en los regalos que vamos a hacer a los niños.

 

Soledad Cornejo

Dpto. de Orientación

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